¡¡Felicidades Presi!!

Hace tiempo, prometí escribirte una canción...como siempre, mal y tarde, la tienes aquí...

No soy muy dado a dedicar entradas del blog a personas en concreto, pero bueno, como lo prometido es deuda, no me queda más remedio qué hacerlo para poder seguir viviendo en paz conmigo mismo.

Esta es una larga historia, aunque su duración real haya sido menor que un año, pero durante este tiempo han pasado demasiadas cosas que merecen ser narradas, aunque todas las historias no tienen porqué tener un final feliz...pero empecemos por el principio...tócala Nuno...

Recuerdo perfectamente el día que empecé a ejercer mis labores de delegado del equipo Senior Autonómica del CB Laredo (recuerdo el día, la fecha no, creo que fue por finales de Septiembre o principios de Octubre del 2007, mes arriba, mes abajo) Fue en un partido de la fase previa, contra uno de estos tres equipos: UCB, Camargo o Castro...creo que fue Camargo, fue en el Amavisca de fijo un sábado por la tarde pero el equipo lo tengo en duda...si total que más os da!! Sigo. Me enrolé en el equipo empezada la liga porque antes no había podido por diferentes compromisos (ya sabéis, entrevistas, firmas de autógrafos, sesiones de fotos, inaugurar hospitales, una vida ocupada la mía) y ese día me presentaron a una de las personas que posiblemente hayan influido más en mi vida, tras Charly Glamour (cantante de Gigatrón) y el moreno de Cruz y Raya. Estoy hablando de Óscar San Emeterio, presidente del CB Laredo que compagina sus arduas tareas presidenciales como entrenador del Senior Autonómica.

El primer encuentro fue frío (hombre, tampoco esperaba un beso de tornillo...), no nos conocíamos personalmente y al principio mantuvimos las distancias. Sin embargo, él en todo momento se mostró receptivo a lo poco que podía ofrecerle, preguntándome por las estadísticas o por cómo veía el partido. Yo he de reconocer que estaba un poco nervioso, tampoco quería quedar como un tonto el primer día (tiempo había para ello) y empecé a balbucear y a dudar en lo que decía (ya sabéis, es mejor estar callado y parecer tonto que hablar y demostrarlo...) Y nada, me fui para casa tan contento.

Y poco a poco nuestra relación fue madurando. Me dejaba ir con él en los desplazamientos, me hacía cargar con los balones, me hacía llevar el agua, me hacía limpiarle el coche (bueno eso no...jaja) pero se hacía querer. Empecé a ir a los entrenamientos, a pasar más tiempo con él...incluso empecé a mirar trajes de novia, pero más tarde me enteré de que su corazón estaba ocupado por otra persona...y la relación se enfrió un poco. Pero conseguí controlar mis celos y mi rabia e intenté reconducir la situación por otro camino.

Como en toda relación, hay momentos duros pero que unen a su vez mucho más. En este caso fue una lesión que tuvo en el pie a mediados de la temporada. Estar tanto tiempo con las muletas en ristre y seguir yendo todos los días a entrenar tiene mucho mérito. Además, las muletas son útiles porque así puedes soltar un hostión al que lo haga mal (que no lo hizo eeeh) Pero eso, que fueron momentos complicados que toda pareja entrenador/delegado debe pasar para que su relación se afiance.

El punto álgido llegó un bonito sábado primaveral. El sol radiante se elevaba iluminando con su soberbia gracia toda la región. Había empezado ya la fase de ascenso a liga EBA, y fuimos juntos a ver a los otros dos equipos del grupo de Laredo, que se enfrentaban en Torrelavega. Allí nos plantamos, con Óscar aun con la pierna renqueante dispuestos a presenciar el partido. El partido bueno, no estuvo mal, victoria para Merka fácil por 25 puntos. Lo importante estuvo en esos momentos de viaje en el coche, compartiendo cosas. Pero lo que no me esperaba, es que de improviso saliese por una desviación de la autovía antes de llegar a Laredo. Me llevó por una calle oscura, solo distorsionada por la iluminación de los faros del coche. Acabamos llegando a un viejo hotel de carretera. Allí Oscar apagó el motor y las luces y me cogió entre sus fuertes brazos para después darme hasta por el...¿os habéis puesto cachondos eh guarretes? En realidad lo que pasó fue que fuimos a repostar gasolina, pero como había por medio mangueras y tal se me ocurrió la bobada esta del hotel ;)

Pero esta temporada, ya sí que sí, todo llegó a su fin. Este año no voy a ser el delegado del Senior Autonómica. Me queda el consuelo de poder disfrutar de ellos viéndolo desde la grada. Aunque no va a ser lo mismo, mi corazón siempre estará en el banquillo junto a ellos, junto a él.

Ahora ya en serio. Fue un año bonito, si bien no en lo deportivo, sí que me tocó conocer a bastantes personas. Con Óscar tuve una relación quizás un poco más cercana, por eso de los entrenamientos, de los partidos etc. etc. (y que es el presi y quien a buen árbol se arrima...jaja) y el otro día le prometí que le iba a dedicar el blog a él. Y...¿por qué? pensaréis...pues que el otro día fue su cumpleaños y yo ni le hice ni un regalo ni le felicité ni nada, menudo delegado que no se preocupa...y es lo mínimo que podía hacer por él.

Así que...¡¡FELICIDADES PRESI!!

Un saludo ;)